Se acerca la hora de comer. ¿Ya le hace ruido el estómago? Está hambriento y necesita alimentarse antes de volver a trabajar, un ritual placentero que le proporcionará nueva energía y anulará la sensación de hambre. Pero ¿cómo funciona este mecanismo?
Regulación de la ingesta de alimentos
El hambre y la satisfacción juegan un papel importante. El estómago vacío, estimulado por la vista y el olor de la comida, causa la sensación de hambre. Y un estómago lleno provoca satisfacción. Aquellos alimentos que contienen mayor cantidad de fibra sacian más. Además, la fibra ralentiza el proceso de descomposición en el estómago, por lo que la sensación de satisfacción se prolonga. ¿Sabía que la comida líquida desaparece mucho más rápido del estómago que la comida sólida? Es por esta razón que la satisfacción dura poco tiempo.
Un estómago vacío activa el sentimiento de hambre. Esa sensación desaparece después de la comida, cuando el nivel de glucemia aumenta. El páncreas reacciona con la producción de insulina, que vuelve a situar los niveles glucémicos dentro de la normalidad. Entre las cuatro y seis horas siguientes a la ingesta, el nivel glucémico se mantiene bajo, equilibrado con las existencias de glucógeno en su hígado.
La subida del nivel de glucemia
Cuando el nivel de glucemia aumenta precipitadamente, el cuerpo produce mayores cantidades de insulina. Esto ocurre tras ingerir alimentos con muchos hidratos de carbono y poca o inexistente fibra alimentaria, como los caramelos, las galletas y los refrescos. Como consecuencia, el nivel glucémico vuelve a descender rápidamente y se consume toda la energía. Pronto tendrá hambre de nuevo y necesitará comer algo. Es precisamente este proceso el principal causante del sobrepeso.
Las sensaciones de hambre y satisfacción se forman en el cerebro, y varias sustancias juegan un papel importante en su regulación. Estas sustancias son el origen de la comunicación entre los sentidos, el aparato digestivo, la sangre y el hipotálamo, y también explican la ingesta emocional. Además, los pensamientos y sentimientos, regulados por las hormonas, afectan igualmente las sensaciones de hambre y de satisfacción. Y como ya sabe, ¡las hormonas tienen mucha influencia!
El conocimiento le hace más consciente
En este blog ha podido leer sobre cómo actúa la sensación de hambre. Es importante ser consciente del funcionamiento de los diferentes procesos en su cuerpo. Varios procesos afectan su comportamiento alimentario. Ser consciente es un primer paso hacia un peso saludable y estable.
